— ¡No puedes hacerlo! Solo quería que lo supieras...S-Solo eso...—La chica se llevó las manos a la cara, sabía que había sido mala idea decirle lo que en realidad quería. Sin embargo no quería ser ella la que arruinaría una vida plena, con sueños y estabilidad. Y era obvio que estaba mintiendo con cada palabra, verdaderamente se lo planteó en un segundo. Teniendo todo aquello que Fanny tendrá en las siguientes horas. El las que Michael y Fanny unirían sus vidas para ser uno mismo. En el que Leah no encajaba para nada.
— Fanny no me importa en lo más mínimo...—Susurra levantando el rostro de Leah, podría decirse que es cierto pero hay un poco de amor entre ellos. A Michael le importa Fanny. Pero su corazón y alma le pertenecen a Leah y eso estaba mal. Él lo sabía. Sin embargo no iba a desaprovechar la única oportunidad que ella le estaba dando. Una en la que probablemente ellos guardarán en lo más profundo de su corazón y alma.
Esa noche no hubo nada más que respuestas a preguntas que se hicieron hace años, Michael se encargó de hacerle saber lo mucho que la amaba. Esa noche ellos no hicieron el amor se unieron como uno mismo, su cuerpo se fusionó y se convirtió en uno solo. Sin embargo a la mañana siguiente Leah se sentía culpable. Había cometido el peor de los pecados y aún así fingió no saber nada a tan sólo unas horas de la ceremonia.
Al pasar por las puertas de la iglesia pudo verlo a él desde lejos y se sintió conmovida, imaginando la misma escena de ella entrando al altar, teniendo una vida perfecta junto a su amado que no le pertenece. Tomó asiento justo al lado de todos los presentes y solamente se oían sutiles murmullos de gente que estaba emocionada por esta ceremonia.
« Fanny, se ve espléndida.. »
«Encontró a un buen hombre..»
«Ojalá su amor sea para siempre..»
Murmullos y más murmullos atormentaban la mente de Leah, quien solamente se dignó a sonreír de sobremanera al momento en el que la Unión de ellos daba inicio. Los escuchó decir todas y cada una de las promesas que solamente se le dicen a un amor incondicional y su corazón latía a mil por minuto mientras era llamada para ser testigo de una unión llena de «Amor.» un sentimiento que fue sustituido por tristeza y egoísmo, ¡HABÍA TRAICIONADO A LA NOVIA DE SU MEJOR AMIGO! ella no debería de estar aquí presente frente a Dios, había cometido bastantes pecados pero aún así fingió estar feliz por ambos. Al felicitar a Fanny luego de la ceremonia y con todo el dolor de su corazón. Leah Estaba segura de que ellos serían felices para siempre.
O al menos eso Creía...
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(Pequeño One-shoot extraído de mis memorias y/o hojitas esparcidas y pérdidas en mi cuaderno)
Gracias por leer. ❤
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